Saltar al contenido
Volver a la vista general

Malí: testimonio de una crisis

Publicado el 11-04-2019
Tiempo de lectura 3 minutos
  • Mali
  • Noticias
The coup led to the ousting of Mali's then-president Amadou Toumani Touré (European Parliament - Flickr)
El golpe provocó el derrocamiento del entonces presidente de Malí, Amadou Toumani Touré (Parlamento Europeo - Flickr)

Este blog es de Mirjam Tjassing, representante de NIMD en Mali. Antes de incorporarse a NIMD, Mirjam trabajó como diplomática para los Países Bajos y publicó un libro sobre la crisis de Mali, titulado Malí: Una Casa de Campo (Mali: Un castillo de naipes). Mirjam hablará de su libro y de la política maliense en la edición de este año del Afrikadag el 13 de abril en Ámsterdam. Aquí cuenta lo que la llevó a escribir el libro y a compartir la historia política de Malí.

En 2012 me trasladé de Burkina Faso a Mali para trabajar como responsable de asuntos políticos en la Embajada de los Países Bajos. Apenas dos semanas después de mi llegada, estalló una rebelión en el norte, seguida de un golpe de Estado en la capital de Mali, Bamako. Eran tiempos muy ajetreados para un oficial de asuntos políticos; era de suma importancia entender lo que estaba ocurriendo en Malí para poder determinar qué podía hacer la Embajada para ayudar a estabilizar la situación. En otras palabras: Me lanzaron a lo más hondo y tuve que crear rápidamente una amplia red de contactos.

Durante el periodo de transición posterior al golpe, todo el mundo intentó comprender cómo las cosas habían podido llegar tan lejos. Había un amplio consenso en que los culpables eran la corrupción y el nepotismo, así como la política de consenso del Presidente Touré. Esta política, que intentaba dar a todos un asiento en la mesa del poder y compraba a la oposición, había acabado por silenciar por completo el debate público. Por ello, durante el periodo de transición se habló mucho de reformar a fondo el Estado. Pero, ¿quién estaba legitimado para llevar a cabo esas reformas? Muchos pensaban que el gobierno no electo, fuertemente influido por los militares tras el golpe de estado, no lo estaba. Así que la comunidad internacional presionó para que se celebraran elecciones. Pero sin reformas, el viejo sistema que había provocado la rebelión y el golpe pudo volver a introducirse tras las elecciones.

El golpe provocó el derrocamiento del entonces presidente de Malí, Amadou Toumani Touré (Parlamento Europeo - Flickr)

 

Una vez celebradas las elecciones en 2013, toda la atención se centró en encontrar una solución a la crisis del norte. Resulta revelador que ya apenas se hablara de la reforma del Estado. Mientras tanto, los diplomáticos extranjeros se sucedían a marchas forzadas, porque Mali se había convertido de repente en un destino de penuria del que la gente saldría al poco tiempo. Y así, la necesidad de reforma se borró de la memoria colectiva de la comunidad internacional, y todo el mundo fijó su atención en la negociación de un acuerdo entre el gobierno y los grupos armados. Una vez más, apenas hubo espacio para la voz del pueblo. El mensaje era claro: si quieres conseguir algo, las instituciones democráticas no dan mucho de sí. Se consigue más con las armas. Este contexto permitió que la inseguridad se extendiera al centro de Malí.

Tras recibir formación por parte del personal de UNMAS, la Compañía EOD (Explosive Ordnance Disposal) de la MINUSMA, procedente de Camboya, abandona el aeropuerto de Bamako para ser desplegada en Gao, al norte de Mali, en 2014. (Fotografía de las Naciones Unidas - Flickr)

 

Animada por un colega de la embajada, decidí escribir mi libro Mali, una cabaña. Quería poner de relieve la necesidad de que la sociedad maliense haga oír la voz de su pueblo y reforme sus instituciones estatales. Y estaba claro que la mejor manera de hacerlo era contar esta historia principalmente a través de las voces de los propios malienses. Mi libro no es "la historia de cómo funciona realmente". Es la historia de lo que he entendido a través de años de conversaciones con políticos, funcionarios, investigadores, estudiantes, líderes tradicionales, artistas, activistas, narradores, conductores y vendedores ambulantes de Malí. Y esto es lo que me gustaría compartir con ustedes. En primer lugar porque Malí es un país fantástico, pero también porque Malí está más cerca de Europa de lo que pensamos, y dependemos unos de otros para un futuro pacífico.

Conferencia de Mirjam en Afrikadag tendrá lugar el 13 de abril a las 11.30 horas en el "Marmeren Hal" de la Real Instituto Tropical (KIT) en Amsterdam.