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#DemocraciaBebidas: La promesa de La Haya 

Publicado el 01-07-2025
Tiempo de lectura 2 minutos
  • Noticias

En la edición de mayo de 2025 de Democracy Drinks, los participantes se reunieron en el Humanity Hub de La Haya para mantener una interesante conversación sobre el papel de los ideales democráticos en la escena mundial. El acto contó con la presencia de Benjamin Duerr, abogado internacional, diplomático y autor de De Droom van Den Haag("La promesa de La Haya") y Tijmen Rooseboom, Director Ejecutivo de NIMD.

El libro de Duerr analiza las Conferencias de Paz sin precedentes celebradas en La Haya en 1899 y 1907. Estas conferencias, impulsadas en gran medida por figuras visionarias como Bertha von Suttner y el diplomático holandés Willem Hendrik de Beaufort, abogaron por el desarme, el establecimiento de normas para la guerra y la creación de tribunales internacionales.

¿Fracaso percibido o legado fundacional?

Al parecer, el estallido de dos guerras mundiales desacreditó la ambición de aquellas primeras conversaciones de paz, tachándolas de utópicas e ineficaces. Como señaló Duerr, esta percepción de fracaso pasa por alto el impacto a más largo plazo: que muchos de los principios nacidos en La Haya, como las normas vinculantes de la guerra, la resolución pacífica de disputas o la idea de instituciones jurídicas globales, siguen constituyendo la base del sistema internacional actual. A pesar de las crisis posteriores, el legado de aquellas conferencias sigue conformando nuestras respuestas colectivas a los conflictos y la injusticia.

Los retos de hoy

Los cimientos de la paz y la estabilidad a largo plazo dependen de unas instituciones democráticas sólidas y de una cooperación internacional significativa. Por desgracia, lo que vemos hoy es que la confianza pública en las instituciones democráticas se está erosionando y la cooperación internacional está bajo presión. Hoy en día se presta una atención renovada a la seguridad nacional y al gasto en defensa, como pudimos comprobar en la Cumbre de la OTAN de 2025 celebrada en La Haya.


Lo que necesitamos

Rooseboom señaló que no tiene sentido defender la democracia sólo con inversiones militares. Debe ir acompañada de apoyo a la democracia y cooperación al desarrollo. De lo contrario, los Estados corren el riesgo de agravar las mismas inseguridades que pretenden evitar. Los participantes no podían estar más de acuerdo. En los debates hicieron hincapié en que la seguridad no puede, ni debe, definirse únicamente en términos de fuerza militar.

Duerr también se mostró de acuerdo y subrayó que el mundo sigue necesitando líderes que rindan cuentas, no sólo ante su propio pueblo, sino ante las normas y acuerdos mundiales. Rooseboom añadió que la democracia no consiste sólo en elecciones, sino también en generar confianza, permitir la rendición de cuentas y capacitar a las personas para participar en la toma de decisiones.

El legado de las Conferencias de Paz de La Haya nos recuerda que la cooperación internacional no es sólo una idea elevada, sino que es y sigue siendo esencial para la estabilidad mundial. Y la democracia desempeña un importante papel preventivo. Como subrayaron tanto Duerr como Rooseboom: una sociedad democrática es más resistente, no sólo internamente, sino también como miembro de la comunidad internacional.