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Apoyo a las comunidades indígenas de Colombia: La historia de Ascención Velasco

Publicado el 15-09-2019
Tiempo de lectura 3 minutos
  • Colombia
  • Historias

Este Día Internacional de la Democraciacompartimos la historia de Ascención Velasco, líder de la comunidad indígena Misak en el departamento del Cauca y primera mujer gobernadora del clan Guambiano, comunidades indígenas que viven en el suroeste de Colombia. También es alumna de la Escuela de Democracia de NIMD en Colombia. Una vez al mes, viaja dos horas en autobús desde Silvia -el municipio de su reserva indígena en el suroeste de Colombia- para asistir a las sesiones de la Escuela de la Democracia que se celebran en Popayán, la capital departamental del sur. Es una de los casi 100 alumnos que asisten a la Escuela de la Democracia, una de las ocho que existen en Colombia.

Un líder local da un paso al frente

Ascención es una líder política experimentada y reconocida en su comunidad. Comenzó oficialmente su carrera política en 2013, cuando fue elegida Gobernadora de su reserva indígena, o Resguardo. Era la primera vez que una mujer ocupaba ese cargo desde la Constitución Política de 1991, que reconoció la autonomía de las comunidades indígenas. La Constitución consagró su derecho a aplicar su propia ley y a tener sus propias instituciones políticas. Ella aprovechó esta oportunidad para trabajar por el bienestar de su pueblo, su territorio y la preservación de sus tradiciones.

Tras su paso por la Gobernación, fue elegida miembro del Consejo de Silvia en 2015. Fue la única miembro de su partido político (Autoridades Indígenas de Colombia) en ser elegida. Los indígenas en Colombia son una de las minorías más subrepresentadas (tanto a nivel local como nacional). A pesar de algunos avances gracias a la Constitución de 1991, actualmente se encuentran en una gran lucha por garantizar servicios básicos como la seguridad alimentaria, los servicios de salud y el acceso al agua potable. Es más, según la Misión de Observación Electoral, 111 líderes comunitarios en Colombia fueron asesinados en los últimos nueve meses de 2018 debido a su actividad política y social.

A pesar de su experiencia como Gobernadora, el Consejo era la primera vez que Ascención participaría en una institución política no indígena, y tenía muy poca información sobre cómo funcionaba el sistema.

"Por aquel entonces pensaba que la democracia occidental sólo era corrupción, desigualdad y malas prácticas. Para mí, la política era un privilegio limitado a muy pocas personas que podían acceder al poder" admite Ascención.

Afortunadamente, el NIMD estaba fundando al mismo tiempo una Escuela de la Democracia en Bogotá, la capital de Colombia. El programa de la escuela se adaptó específicamente a las mujeres recién elegidas.

Aprovechar las nuevas oportunidades

En la Escuela de la Democracia de Bogotá, Ascención conoció los detalles del sistema político en un curso impartido por el entonces congresista y ahora Presidente de Colombia, Iván Duque. Esto y los cursos sobre resolución de conflictos le dieron las habilidades necesarias para participar en el Consejo, a través del cual podría tender puentes entre las comunidades indígenas y el resto de los habitantes del Cauca.

Ahora Ascención se encuentra en el último año de su mandato en el Concejo, lo que significa que su carrera política está cambiando de nuevo. Por ello, se inscribió en la nueva Escuela de la Democracia en Popayán que NIMD Colombia implementó en 2018.

En sus palabras: "Creo que nosotros sabemos algo que ustedes no saben, y ustedes saben algo que nosotros no sabemos. Por eso es tan importante participar en la Escuela de la Democracia; porque es un lugar donde podemos encontrarnos. Nosotros, los indígenas, tenemos mucho que aprender, pero también que enseñar. Aquí, en la Escuela de la Democracia, podemos intentar que la política funcione de la misma manera que nuestra filosofía Minga: un esfuerzo cooperativo de todos para construir una sociedad mejor".

La Escuela de Democracia de Popayán 2018 llevó a Ascención por las complejidades de temas como diversidad de género, campañas, derechos humanos, transparencia política y corrupción.

Pasar la antorcha

Ascención no duda de que, aunque deje el Consejo, su compromiso político continuará. Piensa hacerlo a través de organizaciones de mujeres, transmitiendo lo que ha aprendido a las generaciones venideras. "Ahora veo que la democracia puede ser participación, diálogo y tomar las mejores decisiones posibles para mejorar nuestra sociedad. Creo que si comparto lo que he aprendido en la Escuela de la Democracia con mi comunidad, esto ayudará a que más mujeres misak participen en política".

Continúa: "Mi comunidad me eligió para representarla. Tengo la responsabilidad de ser la voz de las mujeres y los hombres misak, así como de proteger nuestros derechos y cumplir nuestros deberes".

Esto ha resultado ser una tarea difícil. Los grupos indígenas, en particular, se han enfrentado a retos abrumadores en su camino hacia la representación política; la amenaza de la violencia amenaza constantemente a la población y silencia su actividad política.

La de Asención es sólo una de las 800 historias de alumnos de las Escuelas de la Democracia de NIMD en Colombia, creadas este año en el marco del programa Acción Democrática por la Paz. En la actualidad, NIMD forma parte del Grupo Internacional de Apoyo al Acuerdo de Paz establecido entre el Gobierno colombiano y el antiguo grupo guerrillero FARC (actualmente el partido político "Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común"). Como parte del Grupo nombrado en el Acuerdo de Paz, NIMD está promoviendo la participación e inclusión de las minorías que tradicionalmente han sido excluidas del sistema político..