Situar a las mujeres indígenas en el centro de los procesos de construcción de la paz: Una historia de Guatemala

Los Acuerdos de Paz firmados entre el gobierno guatemalteco y la guerrilla izquierdista representada por la Unidad Revolucionaria Nacional Guatemalteca (URNG) en 1996, pusieron fin a una guerra civil que duró más de tres décadas y que afectó desproporcionadamente a las poblaciones indígenas del país.
Los acuerdos de paz establecieron una serie de compromisos para abordar la desigualdad social, garantizar los derechos de los pueblos indígenas y promover la participación activa de las mujeres. Siendo esta última "esencial para el desarrollo económico y social de Guatemala". A pesar de estas disposiciones, la plena aplicación de los compromisos establecidos en los acuerdos de paz sigue siendo un reto. Machismo en la vida pública y privada, la pobreza estructural y el racismo contra las mujeres indígenas ha impedido la participación activa de las mujeres en los escenarios políticos y en el debate público en Guatemala.
En respuesta a la falta de avances en la aplicación de las acciones de los Acuerdos dirigidas a las mujeres, y a su escasa participación en el escenario posterior a los Acuerdos, las organizaciones de mujeres de la sociedad civil han tomado la iniciativa.
La Asociación Mujer Tejedora del Desarrollo (AMUTED), una organización guatemalteca de defensa de los derechos de la mujer, lidera una iniciativa para reforzar la participación política de las mujeres indígenas de las tierras altas occidentales en favor de la paz y la seguridad. A través de su trabajo, AMUTED estableció redes de mujeres a nivel departamental en Huehuetenango, Totonicapán, Sololá, Quiché y Quetzaltenango. Aquí las mujeres dispusieron de un espacio seguro para intercambiar experiencias, construir alianzas, fortalecer sus habilidades de incidencia y aprender sobre los acuerdos de paz. Estas acciones han abierto caminos hacia una mayor visibilidad y participación política de las mujeres indígenas en Guatemala.
Mejores prácticas para un mayor impacto
Para tener un impacto significativo e implementar cambios que sean sostenibles, las jóvenes líderes indígenas adultas participantes, reconocieron la importancia de implementar y materializar acciones de incidencia de manera colectiva y práctica, especialmente después de completar los procesos de capacitación y construcción de agenda. El proyecto fue diseñado teniendo como punto de partida la cosmovisión maya, donde la tradición oral y la transferencia de información y sabiduría de los mayores a las generaciones más jóvenes, es esencial. Los espacios creados por AMUTED permitieron que esto tuviera lugar e incluyeron momentos para la curación del trauma de la discriminación y la violencia estructurales. La aplicación de un enfoque interseccional que tiene en cuenta el género y la etnia permitió el éxito de la iniciativa.
AMUTED fue más allá de crear oportunidades para la reflexión y la formación, exponiendo a las mujeres a situaciones prácticas que reforzaron su confianza y su capacidad para llevar a cabo acciones de incidencia política. Al describir la formación, una mujer indígena compartió:
"En uno de los ejercicios nos hicieron escribir un plan estratégico, algunos de los compañeros escribían por primera vez, pero luego, cuando revisamos lo que habíamos escrito, dijimos: ¡vaya! somos productores de conocimiento. Después de eso nos sentimos mucho más cómodos cuando presentamos el plan a los actores clave del municipio."
AMUTED también creó espacios clave para la acción de incidencia. Se organizaron encuentros regionales con mujeres participantes de los diferentes departamentos, que permitieron construir agendas comunes de incidencia, visibilizar y reconocer el papel de las mujeres en la incidencia por el reconocimiento de los derechos de las mujeres indígenas y el mayor cumplimiento de los compromisos del acuerdo de paz.
Como resultado de la capacitación, las mujeres indígenas participantes cuentan ahora con agendas de incidencia política que se implementan a nivel local con la coordinación de AMUTED. Algunas de las principales preocupaciones planteadas por las mujeres se refieren a la necesidad de reforzar la institucionalidad sobre cuestiones de la mujer resultante de los acuerdos de paz, la falta de programas para que las mujeres indígenas puedan acceder a servicios básicos como la educación, la salud y la justicia, y la falta de un entorno propicio y de disposiciones legales que apoyen la participación de las mujeres en la toma de decisiones.
Obstáculos y oportunidades para el futuro
Para garantizar la sostenibilidad de los procesos de cambio iniciados por AMUTED, es necesario continuar con el apoyo, el seguimiento y la tutoría de las redes de mujeres y la promoción a nivel local, así como apoyar la amplificación de la promoción desde el ámbito local al regional y nacional.
Las organizaciones de mujeres indígenas, como AMUTED, se enfrentan a dificultades para acceder a una financiación sostenible que les permita reforzar su capacidad interna y prestar un apoyo continuado al liderazgo de las mujeres locales. De ahí la importancia de mecanismos flexibles y accesibles como la Ventana de Respuesta Rápida del Fondo Mujer, Paz y Asuntos Humanitarios. Además, se confirma la importancia del papel que organizaciones como NIMD pueden desempeñar en el fortalecimiento de las organizaciones locales para acceder a la financiación y proporcionar asistencia técnica, garantizando al mismo tiempo la apropiación y el liderazgo locales.
Parte de un esfuerzo mayor
Esta historia es uno de los tres estudios de caso en los que ha trabajado NIMD como parte de nuestro trabajo sobre mujeres, paz y seguridad en América Latina. Compartimos las historias de mujeres de Guatemala, pero también de Colombia y Venezuela. Este proyecto cuenta con el apoyo de la Ventana de Respuesta Rápida del Fondo Mujer, Paz y Asuntos Humanitarios, que aborda el déficit de financiación sobre la participación de las mujeres en los procesos de paz formales e informales. Le invitamos a leer sus historias, que documentan la resistencia y el compromiso de las mujeres en la búsqueda de una paz sostenible. aquí.
El NIMD está comprometido con la participación de las mujeres en la política, la toma de decisiones y la consolidación de la paz para lograr democracias pacíficas más sostenibles e inclusivas en todo el mundo. En todo el mundo se reconoce que la inclusión de las mujeres y las poblaciones infrarrepresentadas en la paz está vinculada a la consolidación de una paz más sostenible. A pesar de ello y de los compromisos adquiridos a través de la resolución 1325 del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, la participación significativa de las mujeres en las negociaciones de paz, la aplicación de los acuerdos de paz y los procesos políticos en curso sigue estando rezagada.
En América Latina, barreras estructurales como las normas de género restrictivas, la violencia de género contra las mujeres en la política y las líderes sociales, la política y los marcos jurídicos insolidarios siguen afectando a la participación significativa de las mujeres en la toma de decisiones, a la influencia de las mujeres en las negociaciones de paz y a la aplicación de las disposiciones de género de los acuerdos de paz.
A pesar de las importantes diferencias entre las dinámicas de conflicto y paz en Colombia, Venezuela y Guatemala. Desde nuestra propia experiencia y la de nuestros socios es esencial crear espacios seguros para que las mujeres intercambien y construyan agendas comunes, reconociendo la diversidad de las mujeres. Utilizar metodologías de diálogo, mediación e incidencia para fortalecer la confianza y las capacidades de las mujeres.