Mejorar la participación política en Colombia: una necesidad candente en medio de la incertidumbre

Hoy se lanza nuestro nuevo Acción Democrática por la Paz cuyo objetivo es apoyar una política inclusiva y receptiva en Colombia. El Director del Programa, Andrés Sáenz Peñas, reflexiona sobre lo que se necesita para lograr una paz duradera en su país.
El Acuerdo de Paz entre el Gobierno Nacional de Colombia y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC-EP) es el hito político más importante en la historia reciente de mi país. La decisión llegó tras casi cuatro años de conversaciones, con los equipos negociadores decididos a lograr el mejor acuerdo posible y poner fin al conflicto en el país.
Con el Acuerdo de Paz, la guerrilla más antigua de América Latina renunció a la lucha armada e inició su transformación en un partido político legal: las FARC (Fuerza Alternativa Revolucionaria Común).
El Acuerdo abrió un nuevo capítulo en la historia de Colombia y demuestra que, por complejo que sea un conflicto, donde hay voluntad política siempre hay solución política.
Sin embargo, las heridas siguen siendo profundas en la conciencia colectiva de mi país. Según el Centro Nacional de Memoria HistóricaEn el año 2000, al menos 220.000 personas murieron, 25.000 desaparecieron, casi 30.000 fueron secuestradas y al menos 5,7 millones fueron víctimas de desplazamiento forzado durante el conflicto armado.
A pesar de ello, Colombia es muy prometedora para la consolidación de la paz tras el conflicto. Se han producido importantes innovaciones para la consolidación de la paz, como la integración de las cuestiones de género; la garantía de los derechos de los partidos de la oposición; y la inclusión de un papel formal para las víctimas en el Proceso de Paz, con personas que sufrieron a manos de diferentes grupos armados reuniéndose directamente con los negociadores.
Aún está por ver cómo se desarrollan estos elementos durante la implementación del Acuerdo de Paz. Pero, para la mayoría de la gente en mi país, una Colombia post-conflicto es todavía una idea etérea y aún no se han logrado resultados tangibles. Esta percepción tiene sus raíces en un contexto de polarización política y frágil apoyo al Acuerdo de Paz.
Además, hay una crisis de confianza en las instituciones políticas. Según Gallup, una de las mayores encuestadoras de Colombia, sólo 12% de las personas tienen una opinión favorable del Congreso.
En este contexto, la mejora de la participación política es el camino a seguir. Los actores políticos están llamados a desempeñar un papel crucial en la implementación del cambio transformador necesario. No sólo deben construir una paz sostenible, sino también reconstruir la confianza de los colombianos en sus instituciones políticas.
La necesidad de aumentar la participación política de todos los grupos relevantes en el proceso de toma de decisiones políticas es un nuevo reto para los responsables políticos colombianos. Pero también necesitará de la cooperación internacional. Los proyectos en Colombia deben contribuir a profundizar en la cultura democrática para ayudar a la aplicación del Acuerdo de Paz.

Nosotros, en NIMD Colombia, realmente creemos que es a través de la participación política activa e informada de todos los actores políticos, culturales y sociales que el cambio transformador será posible.
El "Acción Democrática por la Paz", financiado por la Unión Europea e implementado en su totalidad por NIMD Colombia, es un paso en la dirección correcta hacia la consecución de una paz sostenible en un entorno político inclusivo y diverso.
Todo lo que necesita saber sobre el nuevo programa (en español).