Qué hacemos
En el Instituto Holandés para la Democracia Multipartidista nos esforzamos por promover democracias pacíficas, justas e inclusivas en todo el mundo.
Lo hacemos fomentando la confianza y el diálogo respetuoso entre políticos, partidos políticos, sociedad civil y ciudadanos. Acercamos a los ciudadanos a sus representantes electos y reunimos a los políticos para que colaboren por encima de las diferencias políticas.
El NIMD cree firmemente que, construyendo sociedades más igualitarias y pacíficas y abordando las causas profundas de los retos globales, podemos fomentar un mundo más estable, integrador y próspero para todos.
En el centro de todo nuestro trabajo está el principio de inclusividad: nos esforzamos por dotar a las personas -desde grupos tradicionalmente marginados hasta políticos consolidados- de las habilidades, los conocimientos y las redes necesarias para participar de forma significativa en la política. Porque, en NIMD, creemos fervientemente que las sociedades sólo pueden prosperar cuando se escuchan todas las voces.
El trabajo del NIMD se divide en cinco categorías o temas: Diálogo, Educación para la Democracia, Mujeres y Política, Jóvenes y Política y Fortalecimiento de la Infraestructura Democrática.
nuestros temas
- Educación para la democracia
- Diálogo
- Política responsable
- Las mujeres en la política
- La juventud en la política
Educación para la democracia
Vivimos en una época marcada por la agitación social, las crisis climáticas, los conflictos y la propagación de la desinformación. Para hacer frente a estos retos, necesitamos una cultura democrática resistente. Una cultura que incluya el respeto mutuo, la rendición de cuentas y el compromiso constructivo puede permitir a las sociedades resolver disputas, abordar retos complejos y proteger las libertades fundamentales.
Diálogo
En el NIMD creemos que la democracia empieza por el diálogo. Sabemos por experiencia que cuando los distintos grupos políticos dialogan entre sí, con la sociedad civil o con la población en general, un país tiene muchas más posibilidades de llevar a cabo reformas, forjar una paz duradera y cultivar una democracia próspera e integradora.
Política responsable
Una democracia próspera necesita políticos que comprendan y respondan a las necesidades, demandas y aspiraciones de su pueblo.
Las mujeres en la política
Como parte de nuestro objetivo más amplio de aumentar la participación política entre los grupos estructuralmente infrarrepresentados, el NIMD trabaja para promover la participación de las mujeres en la política. La participación política de las mujeres, en toda su diversidad, es esencial para cualquier democracia inclusiva y receptiva.
La juventud en la política
Como parte de nuestro objetivo más amplio de aumentar la participación política entre los grupos estructuralmente excluidos, el NIMD trabaja tanto con jóvenes como con políticos consagrados para que los jóvenes asuman el papel que les corresponde en la política.
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nuestros principios
Nuestro enfoque es apartidista e independiente. No estamos afiliados a ninguna denominación o institución política específica y trabajamos imparcialmente con todos los partidos del espectro político. Sin embargo, nuestra imparcialidad no debe confundirse con neutralidad: El NIMD se guía por los valores democráticos que sustentan nuestra visión y misión.
La inclusión ocupa un lugar central en el trabajo de NIMD. A través de todos nuestros programas, nos centramos en fomentar la igualdad de oportunidades para que los grupos estructuralmente excluidos participen en los procesos democráticos a todos los niveles. También nos aseguramos de que nuestras actividades incluyan a diferentes grupos políticos e ideologías. Tanto los partidos gobernantes como los de la oposición son bienvenidos a participar en el diálogo del NIMD sobre cuestiones sociales en igualdad de condiciones.
En NIMD, nuestro impacto y éxito dependen de nuestra capacidad para responder a historias políticas únicas y a cambios en los contextos culturales. Todos nuestros programas comienzan con un análisis en profundidad; evaluamos cómo podemos contribuir a un cambio positivo en el sistema político y la cultura política de un país. Una vez en marcha nuestro programa, ponemos en marcha un sólido sistema de evaluación y hacemos un seguimiento de los cambios en el entorno político. Sólo adaptando constantemente nuestros programas podemos garantizar la continuidad del impacto y la calidad de nuestro trabajo.
Todos nuestros programas se basan en un profundo conocimiento y comprensión del contexto. Ahí es donde entran en juego los conocimientos nacionales de nuestras oficinas en los países y nuestros socios: trabajamos juntos en pie de igualdad para desarrollar estrategias que reflejen y respondan a las necesidades y demandas de cada país.
Lleva tiempo contribuir a la transformación política. Hay que fortalecer a los partidos políticos y a otros actores, ayudar a construir relaciones de trabajo eficaces entre las fuerzas políticas y facilitar la creación de confianza. Por eso invertimos en relaciones duraderas, tanto con nuestros socios como con los actores políticos a los que nos dirigimos.